Ana López Vila es alumni del Colegio de Fomento Vilavella (Valencia), de la promoción 34. Actualmente estudia 2º curso del Grado en Filosofía, Política y Economía en la Universidad de Navarra. Desde 2016 tiene entre manos el proyecto solidario «Terapia de Sonrisas», que pone en contacto a voluntarios con entidades que los necesitan.
Ana, siendo todavía estudiante de Vilavella, se generó en ti la inquietud por ayudar a los demás. ¿Crees que lo que vivías y aprendías en el colegio te influyó?
Desde luego que sí. En primer lugar porque descubrí qué era el voluntariado en el colegio, ya que nos transmitían el valor del servicio continuamente, desde llenar la jarra de agua en el comedor, ceder el paso a padres y profesoras, ayudar en los proyectos del colegio hasta pensar en cómo ayudar desde el «consejo de curso» a que la gente sacara los estudios y hubiera buen ambiente. También, tengo que decir que el primer voluntariado que hice fue en una residencia de personas de la tercera edad y fui con el colegio, recuerdo con mucho cariño ese día porque fue en gran medida el que me impulsó a comenzar el proyecto.
Hablas de que a tus 15 años se empezó a gestar este proyecto ¿Cómo empezó todo aquello?
Me considero una persona muy inquieta y siempre necesitaba estar haciendo algo. Cuando vas creciendo te vas dando cuenta de que en la vida hay mucha gente que sufre y necesita ayuda, yo sentía que necesitaba hacer algo por todos ellos. También pensé que no lo podría hacer sola por lo que decidí que el proyecto que montara involucraría a más gente con esta inquietud. Empecé hablando con algunas entidades solidarias y dado que era muy joven no todas se fiaban de lo que contaba. Así que empecé montando voluntariado por mi cuenta como desayunos solidarios o visitas a residencias. También, empecé a conocer a las personas necesitadas de mi barrio, hablaba con todas ellas y con la ayuda de mis amigas les conseguíamos lo que necesitaban. Poco a poco, éramos un grupo que crecía muy rápido y empezamos a tener la confianza de entidades solidarias con las que todavía colaboramos. En estos cinco años sacando adelante Terapia de Sonrisas ha habido momentos de crisis y de auge como en todo, pero cuando el motivo vale la pena, no hay opción de rendirse.
¿Cómo definirías «Terapia de sonrisas»? ¿Cuáles son los proyectos que soléis llevar a cabo y dónde?
Terapia de Sonrisas es un proyecto solidario que pone en contacto a potenciales voluntarios con entidades solidarias que necesitan ayuda, se podría decir que es una “red de voluntariado”. En la actualidad, se desarrolla en Valencia, aunque hace unos años también se creó una red de voluntarios en Murcia. Los proyectos que se llevan a cabo son los que realizan las entidades solidarias con las que colaboramos. No obstante, seguimos haciendo por nuestra cuenta algunas actividades como “el caldito solidario” que consiste en llevar por la noche una taza de caldo a las personas que no tienen hogar; “singing for smiles” que es el coro que va a cantar a residencias de todo tipo y “tu sonrisa me suena” que abarca el cuidado de personas a las que hemos ido conociendo a lo largo de estos años y a las que intentamos cubrir sus necesidades.
¿Qué planes de futuro sueñas para este proyecto?
En estos momentos nos encontramos en una encrucijada, el hecho de que estemos ante una pandemia mundial, ha dificultado mucho la posibilidad de hacer voluntariado y tratar con gente. Si bien es cierto que está siendo una oportunidad para abrir nuevos horizontes al voluntariado y darnos cuenta de que el servicio es mucho más que ir un día a la semana a una residencia. Soñamos con que cada voluntario de Terapia de Sonrisas esté transmitiendo esperanza, sonriendo a las personas y tratando de hacer lo que pueda para aportar ilusión a un mundo cansado. De todas formas, se puede hacer algún tipo de voluntariado presencial y varios telemáticos, por lo que sobreviviremos durante esta época y esperamos poder crecer más adelante con un proyecto de financiación y mucha gente comprometida.
Si algunos alumni que nos leen quisieran ser voluntarios, ¿qué tendrían que hacer? ¿Cómo pueden ponerse en contacto con vosotros?
En primer lugar, tendrían que ponerse en contacto con nosotros vía mail (terapiadesonrisas.contacto@gmail.com) y se le convocará para una entrevista para conocerle y resolver las dudas que pudiera tener. Una vez realizada la entrevista, pasaría a formar parte de uno de los grupos de Whatsapp desde donde recibiría toda la información sobre las actividades que hubieran. Cabe destacar que no importa la edad ni la disponibilidad presencial, ya que se puede aportar a Terapia de Sonrisas haciendo distintas cosas, como puede ser ayudar en la propia organización de las actividades, en las redes sociales y en la gestión de voluntarios, toda ayuda es bienvenida. Además, las actividades de voluntariado suelen ser en horarios y fechas variadas por lo que la disponibilidad es muy flexible.
«Descubrí qué era el voluntariado en el colegio, ya que nos transmitían el valor del servicio continuamente»